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En medio de la majestuosidad del Océano Atlántico, frente a la costa de Senegal, se encuentra la isla de Gorea. Este lugar, en el que se pueden observar unos atardeceres maravillosos, fue testigo de uno de los episodios más infames de la historia de la humanidad: durante más de tres siglos fue uno de los principales puntos para el comercio de esclavos; se estima que en esta isla más de 20 millones de niñas, niños, mujeres y hombres fueron despojados de toda dignidad humana y vendidos al mejor postor.
La corrupción tiene diferentes caras y está presente en todos los países del mundo, la diferencia radica en la existencia de mecanismos institucionales que permiten investigar e identificar a las personas corruptas, llevarlas ante la justicia y que reciban penas acordes a sus delitos.
En El Salvador nos encontramos en el período de transición de funciones entre el gobierno saliente (de Sánchez Cerén) y el gobierno entrante (de Bukele). Considero que constituye un momento propicio para, por un lado, superar los fetiches que impregnan los discursos políticos y, por otro, poner nombre y apellido a las personas responsables de gestionar lo público.
«Cuando el presidente hondureño violó la Constitución para reelegirse y se mantuvo en el poder de manera ilegal e ilegítima, incluso bajo la sombra del fraude, saqueando el Estado, guardé silencio, porque yo no era hondureño. Mientras el presidente nicaragüense ha sido cómplice de las fuerzas del Estado para reprimir, matar, torturar y desaparecer, especialmente a los jóvenes, yo he guardado silencio porque yo no soy nicaragüense.
A riesgo que el gobierno de mi país me indique que debo abandonar Guatemala, me tomo la libertad de afirmar que los numerosos escándalos de corrupción que han salido a la luz pública en la región centroamericana ponen de manifiesto el carácter endémico e inherente de dicho problema dentro de nuestras sociedades, a todo nivel.
Icefi participó el pasado 23 de abril en el III Encuentro Nacional Red Jesuita con Migrantes en Guatemala –RJM-, organizado por el Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales -IDGT- de la Universidad Rafael Landívar; con una exposición acerca del aporte económico de los migrantes, el papel del Estado ante las causas estructurales de la migración; además de hablar de la corrupción.
Esta investigación forma parte de un esfuerzo que se da en el marco de la alianza entre el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) y el Mecanismo de Pueblos Indígenas Oxlajuj Tz’ikin. Este ejercicio constituye una posibilidad concreta de institucionalizar un método que permita indicar con mayor rigor cuánto de los recursos públicos es destinado a la población indígena.
“Lo público es ineficiente, corrupto, de mala calidad, no sirve para nada, todo se lo roban” palabras que solemos escuchar, o incluso repetir, constantemente. Estas palabras son la cruz con la que la Administración Pública debe cargar, resultado de malas actuaciones de unos cuantos funcionarios o empleados públicos, pero sobre todo de los embates que ha tenido que enfrentar el Estado.